Mientras sigo aquí, sin nada en las manos, sin ningún motivo por el cual seguir el camino. Las noches se me hacen eternas sin dormir, los días se burlan de mi mostrándome lo más hermoso que hay entre las nubes...
Sé que el milagro no llegara, sé que no hay nada más que decir, ni menos que hacer... Solo el tiempo dictará la condena y yo... yo, seguiré aquí, tirado en el piso.
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